Semmy Schilt: Un gigante en las artes marciales
Introducción
Si piensas en leyendas de las artes marciales, es probable que nombres como Bruce Lee o Jackie Chan vengan a tu mente. Sin embargo, hay un nombre que no debería pasar desapercibido: Semmy Schilt. Este holandés de enorme estatura -2.12 metros- ha logrado un sinnúmero de hazañas extraordinarias y ha dejado una huella imborrable en el K-1 y en el kickboxing en general.
Biografía
Semmy Schilt nació el 27 de octubre de 1973 en Rotterdam, Holanda. Su carrera en las artes marciales comenzó temprano, a los 6 años, cuando comenzó a entrenar judo, y más tarde, a los 16, incursionó en el kyokushin karate. Pero fue en kickboxing donde destacó, gracias a su tremenda altura y envergadura, que combinó con una técnica impecable.
Con 25 años, Schilt debutó en K-1, una competición de kickboxing, y lo hizo con una victoria sobre el favorito y campeón mundial Ernesto Hoost. Fue el inicio de una carrera deslumbrante que lo llevó a ganar cuatro campeonatos mundiales en K-1, convirtiéndose en el primer luchador en la historia en lograr dicha hazaña.
El holandés se retiró en 2013, dejando un impresionante récord de 43 victorias, 6 derrotas y 1 empate en combate de kickboxing.
Logros
Schilt es el segundo luchador más exitoso en la historia de K-1, solo por detrás de su compatriota Peter Aerts, quien ganó el torneo tres veces. Además de sus cuatro títulos mundiales, Schilt ganó la Copa Mundial K-1 en 2007, 2009 y 2010, y la Copa de Asia y Oceanía K-1 en 2006.
En 2005, Schilt fue nombrado el “Mejor Luchador del Año” por la revista Holandesa “Sport International”.
Curiosidades
Aparición en cine
En 2004, Semmy Schilt hizo una aparición en la película Ocean’s Twelve, junto a su compañero de entrenamiento, el también luchador de kickboxing Cyril Abidi.
Peso pesado y abanderado
Schilt es uno de los pocos luchadores que han luchado en la categoría de peso pesado, que limita el peso del competidor en 120 kg, y lo ha hecho con gran éxito. Además, tuvo el honor de portar la bandera holandesa en la Ceremonia de Clausura de los Juegos Olímpicos de Beijing 2008.
Fobia de las agujas
A pesar de haber sido sometido a múltiples cirugías debido a lesiones sufridas en combate, Semmy Schilt tiene fobia a las agujas y estuvo varios años sin recibir inyecciones.
En conclusión, Semmy Schilt es un ícono del kickboxing y de las artes marciales, cuya carrera y logros sobrepasan cualquier expectativa. Su habilidad en el ring, combinada con su impresionante físico, lo convierten en uno de los luchadores más imponentes y admirados en la historia del deporte.
